
«Y LA BESTIA QUE VI ERA SEMEJANTE A UN LEOPARDO … Y EL DRAGON (SU PADRE) LE DIO SU PODER, Y SU TRONO, Y GRANDE AUTORIDAD»
Apocalipsis 13: 2
«Y escribe al ángel de la iglesia en PÉRGAMO: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto:
Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el TRONO DE SATANÁS; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, DONDE MORA SATANÁS».
Apocalipsis 2:12-13 (RV 1960)

Todo comenzó cuando Satanás codició el trono de Dios. En lugar de CONFIAR en la gracia de Dios para conceder su deseo, decidió obtener el trono POR SUS PROPIAS OBRAS.
¡Cómo caíste del cielo, lucero de la mañana! Tú, que sometías a las naciones, has caído por tierra. Decías en tu corazón: «Subiré hasta los cielos. ¡Levantaré mi trono por encima de las estrellas de Dios!
Isaías 14:12-14 (NVI)
Gobernaré desde el extremo norte, en el monte de la reunión. Subiré a la cresta de las más altas nubes, y seré semejante al Altísimo».
La frase «subiré a los cielos» sugiere que Lucifer estaba AQUÍ EN LA TIERRA, cuando hizo esta declaración tan arrogante.
La frase «LEVANTARÉ MI TRONO» sugiere que se había apropiado de algún tipo de «trono» terrenal para él.
Sabiendo que él quiere ser Dios, y sabiendo que una vez fue un querubín hermoso y sin igual que cubría el Trono de Dios (Ezequiel 28:14), podemos suponer que trató de copiar el Trono celestial.
Su rebelión y su falta de fe hicieron que Lucifer fuera irremediablemente expulsado del cielo.
Él solo recuperó el acceso cuando el hombre perdió su posición justo debajo de Dios (Elohim), al pecar. Cuando el hombre recupere su posición en el reino celestial, Satanás y sus ángeles, una vez más, serán expulsados.
Esta vez para siempre (Apocalipsis 12: 7-11).
El trono de Satanás se estableció originalmente en Babilonia (Génesis 10:10). Desde allí se trasladó a Macedonia, Grecia (Daniel 8:21). Y en el siglo I dC, se mudó a Pérgamo, Asia Menor, hoy la actual Turquía (Apocalipsis 2:13).
Jesús mismo dijo, claro como la luz del día, que el trono de satanás estaba en Pérgamo (Apocalipsis 2:13). Pero ahora ese mismísimo «trono» real de Satanás fue mudado, una vez más, y se exhibe hoy en Berlín, Alemania (vea la imagen a continuación).

Wikipedia dice:
A partir de 1879 y a raíz de un nuevo acuerdo entre Alemania y el Imperio otomano, los fragmentos del altar se transportaron a Berlín. El gobierno otomano deseaba en principio que los hallazgos fuesen compartidos, pero la influencia alemana, la debilidad política del Imperio otomano a raíz de su derrota contra Rusia, el papel de mediador desempeñado por Bismarck durante el Congreso de Berlín y un pago de 20 000 marcos de oro permitieron a Alemania recuperar la totalidad de las piezas.
Altar de Pérgamo
https://es.wikipedia.org/wiki/Altar_de_P%C3%A9rgamo
Es el mismísimo altar de Zeus. Una estructura masiva de 114 pies de ancho y 108 pies de profundidad, construida por Eumenes II (197 – 159 a de C.), como monumento conmemorativo de la victoria de su padre Atalo I, descendiente por línea materna de Seleuco I Nicátor (uno de los diádocos y general de Alejandro Magno) sobre los gálatas. El mismo tiene forma de herradura y tiene 36,44 x 34,20 de dimensiones.
Pese al paso del tiempo, este fastuoso monumento pudo conservar su buen estado, y en el siglo XIX un grupo de arqueólogos alemanes hallaron sus ruinas y las trasladaron a Alemania.
Por el contrario, el Trono de Dios en la tierra (el Arca de la Alianza) tiene solo unos 4½ pies de ancho, por 2½ pies de alto y 2½ pies de profundidad.
Veamos las ínfulas de grandeza del príncipe de este mundo (Juan 12:31), el príncipe de la potestad del aire (Efesios 2:2) y su insaciable sed de gloria.
La base del trono de Satanás está muy llamativa. La base del trono de Satanás está muy llamativa.
Está decorada (alrededor de todo) con un friso de alto relieve de 371 pies de largo conocido como Gigantomaquia (del griego antiguo γιγαντo-μαχια, que literalmente significa ‘guerra de los gigantes’, y que muestra la batalla entre los gigantes míticos, representados como grandes serpientes con cabezas y torsos humanos, y los dioses olímpicos. Este fue el trono del dios griego ZEUS.
Por lo tanto, tenemos a Jesús mismo, identificando a Zeus como «Satanás».
Y por mucho que el mundo contemporáneo, intelectual y académico, lo considere una de las más importantes obras de arte, del saber y del pensamiento helenístico, y sin duda lo es, a Dios nadie lo toma nunca por sorpresa, y es por eso que El, adelantándose a los planes del hombre y su pensamiento humanístico, lo declara el «Trono de Satanás» (Apocalipsis 2:13)
Para todo aquel que ama y busca la verdad (Jesús), esto es muy significativo, ya que tanto Alejandro de Macedonia, como su madre Olimpia, siempre afirmaron que el verdadero padre de Alejandro era Zeus (SATAN), y no su supuesto padre biológico, el rey Filipo de Macedonia.
Pero hermano, dirá alguno, no solo Alejandro era llamado Hijo de Zeus. También lo eran Hércules (o Heracles) y Perseo en la Mitología griega.
Claro! Pero como bien has dicho, Hércules y Perseo son heroes de la mitología griega; Alejandro fue un personaje histórico, real.
Su madre, Olimpia, siempre afirmó haber concebido a Alejandro a partir de la cópula directa con Zeus (Satanás), el cual se allegó a ella en forma de serpiente (tenía serpientes mascotas que regularmente se arrastraban y dormían en su cama).
Este trono de Zeus o TRONO de satanás en Pérgamo (conocido hoy en día por su moderno nombre Bergama) fue excavado por el arqueólogo alemán Carl Humann en 1878. Más tarde fue llevado a Alemania en piezas y reconstruido allí, donde permanece en exhibición en el Museo Pergamum de Berlín.
Kaiser Wilhelm II, un virulento antisemita, celebró la erección del trono de Satanás en Berlín en 1902.
Adolfo Hitler fue elegido Canciller de Alemania en 1933.
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Hitler, el dictador extremadamente malvado que comenzó la Segunda Guerra Mundial en 1939, es el artífice y responsable de la trama satánica más terrible y sangrienta de antisemitismo y exterminio de judíos que se conozca hasta ahora (y decimos hasta ahora, porque en el próximo período de la tribulación no tendrá precedentes).
Saca tus propias conclusiones.